La Guardia Pretoriana siempre constituyó
un cuerpo de élite con un servicio más corto, mejor sueldo y menor
riesgo e importancia política que otra serie de cuerpos presentes en la
ciudad de Roma como los vígiles o las cohortes urbanas.
El origen de la Guardia Pretoriana,
contrariamente a lo que se piensa, surge a finales de la República. De
hecho algunos de los más ilustres generales romanos de la época (entre
los que cito a Julio Cesar o Pompeyo) ya usaban algunas cohortes de sus
legiones como guardia personal. Su número sería de entre 8000 y 10000
hombres ya con Augusto.
No obstante sería Augusto quien las
articularía establecienso alrededor del 12 a.C. su servico en los 12-16
años. Se estima que el componente de cada cohorte pretoriana sería de
unos 500 hombres.En el 2 a.C. Augusto crea los puestos de prefectos
pretorianos. La misión principal de los pretorianos sería la custodia
y escolta de la familia imperial. Sobre el 14 d.C los pretorianos entrarían
en campaña por primera vez y en torno al 23 ya contarían con sus
propias instalaciones en las afueras de Roma, en lo que sería el Castra
Praetoria o campamento de la Guardia.
Las tropas pretorianas estaban compuestas
mayoritariamente por tropas de infantería, a las que se añadiría un
pequeña fuerza de caballería. El servicio era particularmente
atractivo.Al principio sus efectivos se reclutaban en las zonas de
Italia como Etruria o Campania, para dejar paso a finales del Imperio a
tropas procedentes de regiones como el Danubio. Los pretorianos gozaban
de un trato preferencial comparados con las legiones.
Las condiciones para acceder al servicio
en la Guardia eran duras: debían ser aptos fisicamente, mostrar un
especial predisposición y pertenecer a una familia respetable. Solo
algunos elegidos llegaban a ser principalis,
lo que les permitía alcanzar el grado de centurión en las legiones
romanas. Los tribunos que encabezaban las cohortes pretorianas debien
tener el grado de caballeros (recordar que para entrar en este grado debía
poseerse 400000 sestercios). Estos debían servir como centuriones
durante un periodo en las legiones, lejos de Roma. Tras llegar al cargo
de primus pilus
(el centurión más destacado de una legión), regresaban a Roma donde
pasaban por cargos como tribuno de los vigiles, de la milicia urbana
hasta llegar a tribuno pretoriano. Estos llegarían a convertirse en uno
de los cargos más influyentes de toda Roma.
En cuanto a la uniformidad es poco
probable que variara con respecto a otros cuerpos. Se puede, no obstante
, notar una leve heterogeneidad con respecto al equipamiento pretoriano.
Dos puntualizaciones: el casco ático (tan
conocido en manifestaciones artísticas o en el cine) parece que no fue
usado por los pretorianos, sino solo por los jefes destacados de estos o
los oficiales superiores de las legiones. En cuanto al escudo oval si
que parece que es más largo tiempo usado por los pretorianos que por
los legionarios, pero que ya , a fines del s.I d.C ambas fuerzas llevarán
los mismos tipos. Las túnicas eran blancas,
mientras que el color rojo parece destinado a altos mandos. Las armas no
diferirían, usando el temible gladius
hispaniensis y compartiendo el uso de la lorica
segmentata y la cota de malla, como otras fuerzas
romanas.
Los rasgos verdaderamente característicos
en la uniformidad pretoriana eran la toga civil y sus enseñas. La toga
civil se usaba en el servicio de escolta rutinario de la familia
imperial, mientras que los abanderados pretorianos se distinguían con
una piel de león, no de oso como sus homonimos legionarios. Sin duda,
en sus estandartes también aparecería el verdadero distintivo de los
pretorianos: el escorpión.
Fuente: Ángel Pérez para Imperio Romano