domingo, 31 de marzo de 2013

Ireneo Filaleteo - La Médula de la Alquimia










Del Arte Dorado, tan estimado por muchos,
hemos probado, y enseñado por ejemplos,
que no era fábula como muchos estimaban,
sino real; ahora nuestra musa al fin es llevada
al orden para desvelar su debida práctica,
por la que pueden conseguirse plata y oro.
Y como fundamento de lo que pretendemos,
considera bien, y calibra con buen juicio,
la razón de nuestro trabajo, o de otro modo
gastarás tu costo en vano, y tu obra no sufragará
las inútiles cargas que pueda consumir,
no cosechando de ellas sino hedor y humo.
La Piedra que buscas, dijimos y todavía afirmamos,
es solo oro llevado a una perfección tan alta como es
posible, el cual, aunque es un cuerpo
firme y compacto, sin embargo, por la dirección del arte,
y la operación de la naturaleza, se convierte
en un espíritu tiñiente que nunca se desvanece.
Esta piedra no puede ser perfeccionada sólo
por el ingenio de la naturaleza. Por qué?
Es seguro que el oro no tiene intención de allegarse tan lejos,
sino que permanecerá siempre en su constancia,
Aquél que quiera conseguir esta esencia, debe hacer,
por el arte, que el oro se convierta en polvo.
Y que después sea ablandado en agua mineral,
circulada luego con un fuego debido,
hasta que la humedad sea agotada por la sequedad,
y sea después fijado según el deseo de su corazón.

Embebe éste entonces a menudo, y vuelve a congelar,
y sella al niño en el útero de su madre.
Alimenta éste hasta que llegue a la fortaleza,
capaz de superar a todos los tenaces opositores,
el cual, fermentado, debe sufrir la sentencia
de la negrura repetida, que se desarrollará
mientras que las naturalezas se pudren y mueren,
las cuales estáte entonces seguro revivificar.
Sublima, exalta, y después a la tierra
hazla volver, permitiendo que permanezca en el calor
hasta que el llanto sea cambiado en regocijo.
Sitúa entonces al Rey sobre su asiento real,
que brillando como la llama centelleante
es esa piedra oculta a la que llamamos nuestro Azufre.
Multiplica ésta hasta que llegues
al elixir que lo llamamos de los Espíritus,
que como el juez el día de la sentencia,
juzga al fuego toda la terrestreidad,
que se adhiere, en los metales imperfectos,
a la sustancia perfecta que ahí hay.
Pero así es nuestro sujeto. Debemos pues encontrar
un agente que pueda abrir este sujeto,
el cual, si sabes buscarlo en su propio género,
no necesitarás emplear mucho capital
para prepararlo, pues es de materia vil,
y su asqueroso exterior ensucia mucho.
 
De éste hablan pocos autores, y los que lo hacen
obscurecen esta clave, pues mucho en ellos miente.
Pero yo, amable lector, mostraré tal candor
que nunca ningún hombre lo concibió mayor.
Atiende pues primero a este misterio,
que reside en nuestro agente ígneo.
Créeme, ésta no es una obra a ser conseguida
por uno cuya ingenuidad está embotada, ni tampoco
por aquél que desdeña laborar;
pues la ociosidad es un impedimento para este arte.
Pero si tienes una maña dócil, y eres
industrioso, escúchame entonces.
La sustancia que tomamos primero
es un mineral, familiar al mercurio,
que cuece en la tierra un azufre crudo;
vil a la vista, pero glorioso interiormente,
el hijo de Saturno, Qué más necesitas?

Concíbelo correctamente, pues ésta es nuestra primera puerta.
Es de color de sable, con venas plateadas
que aparecen entremezcladas en el cuerpo,
cuyo matiz centelleante lo mancilla el azufre connato.
Es del todo volátil y nada fijo,
pero tomando en su crudeza nativa
purga toda superfluidad del sol.
Es venenoso en su naturaleza, y sin embargo
abusado por muchos de un modo medicinal.
Si se sueltan sus elementos por el arte,
el interior es resplandeciente como el día,
el cual fluye entonces en el fuego como metal,
del que ningún metalino resulta más quebradizo.
Este es nuestro dragón del cual el dios de la guerra
asaltó con armadura del más fuerte acero;
pero todo en vano, pues una estrella no vista antes
mostró que Cadmo, cuando sintió esta fuerza,
no pudo soportar tan gran poder,
y dividió su alma de su cuerpo.
Oh, fuerza poderosa!. Los sabios contemplaron esto,
y viéndolo se asombraron, llamaron a éste
su León Verde, al que conjuraron con hechizos,
confiando domar con el tiempo su furia.
Le dejaron depredar a los asociados de Cadmo,
y encontraron por su poder que alcanzó el día.
La riña concluyó. Mirad, una estrella de la mañana
se vió aparecer de la tierra;
separadas las carcasas, no fueron lejos,
pero se le apareció un manantial fluyente.
Le dieron a beber a la bestia de este mismo manantial,
y vieron entonces algo que consideraron sumamente extraño.
 
Pues cuando esta bestia se acercó al manantial,
como asustadas, las aguas se retiraron;
la ayuda de Vulcano no valió de nada.
Entonces aparecieron las Palomas de Diana en aderezo brillante.
El aire fue calmado con sus alas puras y plateadas,
en las que el dragón abrazado perdió su picadura.
Entonces el agua volvió con nubes,
y se engulló a la bestia, a la que bebió
hasta que su cuerpo estalló; su piel se volvió
como carbón, y pronto la fuente hedió
con el olor impuro que dió nuestro dragón;
él murió; el agua probó ser una tumba para él.
Con la ayuda de Vulcano este dragón revivió,
y del cielo recibió un alma.
Ambos reconciliados están, para lo que te esforzaste,
y sus almas unidas abandonan sus cuerpos;
éste es el verdadero baño de la ninfa, nuestro león verde,
cuyo semejante nunca antes fue visto.
Pero para no mantenerte por más tiempo en suspenso,
te mostraré llanamente esta alegorías,
desatando los nudos cuyo obscuro sentido
puede aperplejar al lector; sabe ahora pues,
que nuestro hijo de Saturno debe ser unido
a una forma y mercurio metalinos.

Por qué? Es el azogue, y sólo él,
nuestro agente que requiere nuestra obra.
Pero el azogue común no sirve para nuestra piedra.
Está muerto, y sin embargo desea
ser aguzado por la sal de la naturaleza,
y el azufre verdadero, pues es su único cónyuge.
Se encuentra que la sal del retoño de Saturno
es pura, y puede penetrar hasta el centro
de los metales; esta sal abunda en cualidades
que la hacen adecuada para entrar
en el cuerpo del sol, dividiendo sus elementos,
y permaneciendo con él después de que es disuelto.
Busca este azufre en la Casa de Aries;
éste es el fuego mágico de los sabios
para calentar el baño del rey, que prepararás
en una semana. Este fuego permanece estrechamente cerrado.
Abrelo, lo que puedes hacer en una hora,
y lávalo después con una lluvia plateada.
 
Es extraño ver un metal recio y fijo
que sabe soportar el golpe atronador de Vulcano,
y que no se ablandará en el fuego, si se mezclará
en flujo con metal alguno, que sin embargo
sea hecho retrogradar por nuestro nuevo arte,
tanto poder ha tenido este punzante mineral.
Esta obra de la realeza la sella el Todopoderoso,
para enseñarle al prudente que aquí nace el niño real,
al que los justos buscan diligentemente,
y al que son acertados por la estrella;
sin embargo los necios buscan nuestro secretos en cosas
sórdidas, sin su género, lo que les lleva a la ruina.
Esta sustancia es estelada, y está
totalmente inclinada a huir del fuego;
es del todo espiritual, la razón de lo cual,
si la demandas, (para satisfacer tu mente),
toma esto: el alma de uno al otro es un imán;
a esto lo llamamos el beso del viejo Saturno.
Este es nuestro acero, nuestro hermafrodita;
ésta es nuestra luna, llamada así por su brillantez;
éste es nuestro oro inmaduro, pues a la vista
es un cuerpo quebradizo, domado por Vulcano,
cuya alma, si puedes mezclarla con mercurio,
ningún secreto puede permanecer escondido de tí.
 
No necesito la cita de ningún autor, pues he visto
y llevado a cabo este misterio con mis manos;
con la naturaleza he estado a menudo en concilio,
he vuelto suave el cuerpo más sólido
y un cuerpo grosero lo he convertido
en una tierra fija tiñiente, que no se desvanece.
Pero lo digo esto yo sólo?. No, muchos más
declaran lo mismo, y sus nudos yo desato yo aquí;
Artefio lo nombra, pero no llega
a descubrir otro secreto; Por qué?
Es, dice él, a ser buscado por Dios,
a no ser que sea enseñado por un sabio maestro.
 
Este es un acertijo que ha apreplejado mucho
a los estudiantes de este arte; pues los autores dicen
que nuestra piedra es vil, y a continuación preciosa.
Vileza que es arrojada en el camino abierto
en los muladares, sí, se encuentra en lugares asquerosos,
y que debemos tomar por el verdadero fundamento de
nuestro arte.
Nadie puede vivir sin ella, y es aplicada
para usos prohibidos, todas las cuales denotan
únicamente a Marte, al que corresponde todo esto.
En los barcos flota sobre el océano,
y no podemos comerciar sin él;
sin él no vemos ni barco ni casa alguna.
Como él aramos nuestra tierra, cosechamos nuestro grano,
cortamos nuestra carne y nuestros vestidos, con él hervimos.
Su uso es tan grande que no amontonaré ejemplos;
a menudo yace condenado sobre el suelo.
Por él se calzan los caballos, viejos clavos remachados
cuyo encuentro apenas merece la pena, Qué puede ser
ser más vil, digo yo?

La Casa de Marte, el fornido Aries es conocido,
en el que todos los artistas te encargan comenzar
tu obra, Qué puede ser más llano? No puede haber nadie
tan botarate que no conceda que hay en
estas palabras un significado oculto en la letra,
significado que nunca fue explicado mejor.
Belus en la Turba ordena juntar
al luchador con aquél que no se aviene a luchar.
El Dios de la guerra es Marte; asígnale a él
en unión a Saturno, el cual se deleita
en la paz, cuyo reino no necesito relatar,
tan conocido es por todos (se apellida Dorado).
 
Observa la segunda figura que está situada
en el verdadero Rosario de los Filósofos.
El Rey y la Reina con túnicas agraciadas de modo
sumamente real.
sosteniendo entre ellos nuestra verdadera lunaria,
que tienen ocho flores, pero sin raíz;
entre ellos un pájaro, y bajo los pies
el Sol y la Luna. El Rey sostiene una flor,
la Reina la otra, y una tercera (en el pico)
la sostiene el pájaro; el pájaro lleva una estrella
sobre su cola, que habla de nuestros secretos.
El pájaro alado denota al mercurio,
unido con la tierra estrellada hasta que ambos vuelan.
Los viejos sabios mas bien instruyeron al ojo
por figuras, que al oído por palabras llanas;
algunas son tan llanas que cualquier tonto puede colegir
el significado en ellas encubierto, tan claro está.
Esto, yo , un hijo del arte, lo he dicho, para ayudar,
completamente, en otra parte, y tan llanamente como un sol.

A ella remito al lector estudioso,
y proseguiré en mí pretendido curso
de enseñar nuestro agua, que tan pocos atinan,
por la que extraer la semilla del sol tan sagrada.
Aprende este agua con toda tu diligencia,
pues ella es el fundamento de nuestra quintaesencia.
Sabes pues que los metales tienen todos una materia,
la cual no es sino el mercurio.
Este fundamento dió al principio una entrada
a la transmutación, y una posibilidad.
De aquí concluimos que nuestra agua sumamente secreta,
tiene la misma materia que el mercurio vulgar.
Y si el mercurio crudo puede convertirse en oro,
y todos los cinco metales imperfectos, que
por razón de su crudeza se queman en el fuego,
esto ocurre, como enseñan todos los sabios,
porque todos participan de mercurio,
y son transmutables por su propia cuenta.
Y si nuestro mercurio al que llamamos
nuestra agua viva, no es sino oro inmaduro,
entonces cualquier cosa que sea convertida en oro,
por el arte, debe tener tal naturaleza
que pueda ser convertida por el arte en nuestro azogue,
para cuya confección se las ingenia el arte.
 
Así pues, si el plomo, o el estaño, o el cobre fueran
resueltos en un mercurio real,
el arte podría hacer que aparecieran esas aguas,
tan cambiada es su forma, que realmente
cualquiera, o cada una de todas las aguas nombradas,
fueran como nuestro mercurio sófico.
Pero , Qué necesidad hay de esto cuando la naturaleza
ha producido un agua sometida a la mano de todo artista,
en la cual puede ser inducida por la artesanía una forma,
que puede fácilmente gobernar nuestros secretos?
Atiende pues qué mercurio requiere
nuestro más secreto menstruo, pues aseguramos
que en peso ambos son iguales, también en color,
ambos igualmente fluidos, ambos metalinos,
ambos volátiles en el fuego, pero en el nuestro buscamos
un azufre del que carece el de la mina;
este azufre purifica la materia
y la hace ígnea, pero la deja como agua.

Pues el agua es la matriz que, careciendo de calor,
es del todo inhábil para la verdadera generación;
ni será reducido nuestro cuerpo a sudor,
para emitir su semilla, sino en una estación
de fuego circulante, comezclado por el arte
con mercurio( que participa de azufre).
Este azufre debe ser de fuerza magnética,
y por tanto de la substancialidad del oro
(aunque inmadura), sin embargo de un solo origen
tanto en cuanto a la materia como en cuanto a la forma;
una debe ser volátil y fugitiva,
y la otra fija, desatando la primera a la otra.
No hay en la tierra sino un solo cuerpo,
al cual el mercurio está aliado tan de cerca,
como para prepararlo para nuestra piedra secreta,
ocultando el cuerpo sólido en su matriz.
Es, como dije, es el retoño de Saturno,
conocido de todos los magos, y por mí mostrado.

Pues todos los metales, aunque algunos puedan ser mezclados
con el azogue, sin embargo no entran uno en el otro
más que a la vista, y se van
uno del otro por el calor, y percibiréis
que su centro nunca fue penetrado,
ni encontraréis uno alterado por el otro.
Si buscáis la razón, tomad esta respuesta:
que el azufre que reside en los metales
está sellado(si es perfecto), o participa
de heces terrenas, y de crudezas
que aborrece el mercurio, que no se unirá a ellos
aunque a la vista parezca mezclado.
Y si separáis primero estas heces
obtendréis un mercurio fluido,
y un azufre crudo, el cual endurecía
la humedad por congelación;
también encontraréis una sal aluminosa,
pero todos estos son de género muy remoto al del oro.

Pero nuestro estimadísimo mineral,
excepto por sus desperdicios crudos, que son todos separables,
contiene un mercurio puro, el cual
restaurará la vida a los cuerpos muertos, de modo
que sean capaces de propagar su propia especie,
como todas las cosas, generando su semejante.
Pero no contienen en sí azufre alguno,
salvo un azufre ardiente por el que es congelado,
y sin embargo es quebradizo y negro con venas brillantes.
El azufre no es metalino en modo alguno, y se
diferencia poco del vulgar, en cuanto al aspecto externo,
si se separa correctamente como muestra el arte.

Apartadas las heces, aparece un nuez,
en la forma como un metal (pero que puede ser
pulverizada a golpes), en la que se encierra
un alma tierna, que se eleva como humo
en un fuego pequeño, como el azogue,
ligeramente congelada, que arrebata así el fuego.
Esto se lo da la penetración a nuestra agua,
y hace que su cuerpo entre hasta sus raíces,
reduciéndolos a su verdadera primera materia,
invirtiendo el todo desde su centro oculto.
Este requiere que se le una un verdadero azufre,
que encontramos en la Casa de Aries.
Solo por este mineral se consigue que Marte,
por la destreza del artista, y también con la ayuda de Vulcano,
sea retrogradado a un mineral,
como ha sido ensayado a menudo por muchos;
ésta es nuestra verdadera Venus, amada de Marte,
esposa del cojo Vulcano,, pero reprobada por este acto.
Haz primero , pues, que este mineral abrace a Marte,
de modo que ambos arrojen sus terrestreidades;
la sustancia metalina, en poco tiempo,
brillará como el cielo, y de tu éxito
encontrarás por cierto como signo esto:
un sello impreso de tipo estelado.

Este es el sello real, esta es la marca
que pone el Todopoderoso sobre sus extraños sujetos.
Este es el fuego celestial del cual una chispa,
una vez encendido, causa en los cuerpos tal cambio,
que la negrura brilla ahora como una gema centelleante,
y corona a nuestro joven rey con una diadema.
Añade Venus a éste en una proporción de vida,
pues su belleza Marte la admira, y se sabe
que ella mantiene un gran amor con él, y que está
pronto inclinada al movimiento, estando aliada al oro,
y también a Marte, también a Diana brillante,
conciliando el amor y el verdadero deleite.
Vulcano crecerá en celos, y extenderá
su red para capturar a su esposa con Marte en el acto;
El cojitranco cabrón, dolido de sentir su cabeza
con cuernos adornada, y confiando en frustrar éste concierto,
muestra a ambos amantes atrapados dentro de su red,
en la que ambos son envueltos.

No parezca esto una fábula. Observa primero
cómo Cadmo es devorado por nuestra fiera bestia,
el cual, tras atravesar valientemente, merece
un nombre de campeón, pues sobrepasada en poder
esta serpiente, contra un roble, es traspasada
con una lanza mortal, a la cual todos temían.
Observa la estrella, que es solar sin duda,
y esto puede ser aprobado, pues el oro se une
con el niño de Saturno, purgadas sus heces.
Todo lo que es perfecto cae al fondo,
y siendo vertido, tras la fusión,
muestra, cuando se enfría, una estrella, igual que lo hace Marte.

Pero Venus da una substancia metalina,
tan solo despreciable, unida con Marte,
envueltos como en una red, y es
bello de contemplar, lo cual misteriosos poetas
de aguda vista han descrito en guisa oculta,
y sin embargo más claramente para los sabios.
Así que cuando el alma de Saturno, y de Marte,
son mezcladas tan solo por nuestro arte y la ayuda de Vulcano,
ambas son iguales de vuelo, y sus partes no son divisibles,
hasta que el alma de Marte es fijada;
entonces abandona a Saturno, y en los ensayos se encuentra
un oro perfectísimo, cuya tintura es buena y verdadera.
Pero esto debe conseguirse con la mediación de Venus,
o de otro modo no serán separados
por ninguna maña del hombre; ni los resolverás
en polvo; no obstante, unidos se reducirán,
pero solo con la asociación con Venus,
Diana hace de ellos una separación.

Algunos usan las palomas de Diana para preparar
el agua, labor que es tediosa,
y para atinarla correctamente, un raro artista
puede errar dos veces de cada una; el otro modo, que es sumamente secreto,
se lo recomendamos a todos los que intentan ser artistas.
Que el vapor más sutil que el agua,
sea circulado tanto y tan a menudo,
que las almas de ambos (abandonando la materia grosera)
se unan, y vuelen juntas hasta la colina,
donde no las dejes permanecer tanto tiempo
que se congelen, pues entonces trabajas erradamente.
Del hijo del viejo Saturno sean tomadas dos partes,
de Cadmo una, y asegúrate de purificar éstos por la ayuda
de Vulcano tanto tiempo, hasta que,
libre de heces, la parte metalina sea pura;
esto se hará en cuatro reiteraciones.
La estrella te enseñará las operaciones perfectas.
Haz a Eneas igual a su amante,
purgándolos artísticamente hasta que la red
de Vulcano encierre a ambos, la cual toma entonces,
y mira que con el agua sean bien mojados,
con calor y humedad, hasta que , perforadas,
las almas de ambos sean glorificadas.
Este es el rocío celestial que debe ser nutrido
tanto y tan a menudo como lo requiera la naturaleza.

Tres veces al menos, y hasta siete, sea conducido
a través de ollas y llamas, como requerirá la razón.
Ten cuidado al menos de no poner en fuga
la naturaleza tierna; entonces tu fuego será correcto.
Sabe también por cierto que el mercurio,
que debe comenzar la obra, debe ser líquido
y blanco; no seques con un fuego excesivo
la humedad hasta polvo (rojo a la vista),
pues así se corrompe tu esperma femenina,
y perderás tu deseado resultado.
Ni busques convertir el azogue en una
goma clara transparente, o en aceite, o en ungüento,
pues entonces perdida la proporción, no puedes llegar
a la verdadera disolución, sino que debes encomendar
tu desesperado trabajo a otra estación tan diferente,
pues procedes sin una razón verdadera.
Busca pues tan solo añadir un espíritu
del que carece el azogue común, y después
sublima lo grosero hasta el firmamento,
separando los desperdicios por el arte, y cuando
hallan pasado siete veces completas, espósalo
con el oro, de modo que se tengan uno al otro.

Así es preparada la verdadera doncella, por la artesanía
y la ayuda de la naturaleza, la cual, separada de las heces,
se convierte en un retoño celestial, que ablanda
el sólido cuerpo del oro, el cual, separado en átomos
negros, se pudre y corrompe,
y después revive y vuela de nuevo.
Si yo descubriese aquí todos los secretos
que están contenidos en la fabricación de nuestra agua,
sería desdeñado de todos los verdaderos artistas;
pues solo son comunicados a aquellos
a los que Dios se digna enseñarles; el resto
debe vagar en una bruma, y anidar en el error.
Pero aquel que inquiera estudiosamente,
para encontrar con penas y oraciones esta verdad oculta,
y a quien la ambición no excite su deseo,
sino que busque el conocimiento con una mente cándida,
ése, seguro que alcanzará este misterio,
pues nadie, nunca, escribió el arte tan llanamente.

He conocido al Ser Infinito...








                                                                      “He conocido al Ser Infinito
                                                                       que está Resplandeciendo
                                                                       más allá de todas las tinieblas y desilusiones;
                                                                       solo conociéndoLO
                                                                       se escapa a la muerte.
                                                                       No hay otro camino
                                                                       hacia la Inmortalidad”.




    Fuente: Svetasvataro-Panishad, III, 8

Una vez plantada la semilla....







Una vez plantada la semilla, ésta se divide en dos y muere tras
haber dejado salir de su seno el germen de vida. El sepulcro, es
nuestra naturaleza inferior en la cual debemos hacer una apertura
para poder salir. Algunos han visto en el sepulcro una
representación del cuerpo físico, y no es del todo falso, pero
en realidad, lo que impide la manifestación de la vida divina,
la manifestación del espíritu, no es tanto el cuerpo físico,
sino más bien esta coraza fluídica hecha de todos los deseos,
codicias y tensiones de nuestra naturaleza inferior. Es ella la
que se interpone entre nuestro espíritu y el cuerpo físico. Si
no estuviera continuamente creando toda clase de miasmas y de
humaredas, nuestro espíritu tendría el control perfecto del
cuerpo físico. "


Fuente: Omraam Mikhael

martes, 26 de marzo de 2013

FUNDACIÓN DEL CONSEJO MUNDIAL DE INSTITUCIONES MASÓNICAS - CMIM - EN EL PALACIO NACIONAL DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS



NMIP: LUIS F. LEON PIZARRO





EL I.·.P.·.H.·.  JESÚS HUMBERTO RODRÍGUEZ LOZANO G.·.M.·. DE LA GRAN LOGIA NACIONAL MEXICANA "LA LUZ", A.C., Y LA I.·.P.·.H.·. TZITZIQUE JIMÉNEZ HERNÁNDEZ GRAN LUMINAR DEL SUPREMO CONSEJO DEL RITO NACIONAL MEXICANO, A.C. 




EL I.·.P.·.H.·. LUIS FERNANDO LEÓN PIZARRO G.·.M.·. DE LA GRAN LOGIA PATRIÓTICA DEL PERÚ APERTURÓ EL MAGNO EVENTO HACIENDO EL USO DE LA PALABRA LLEVANDO LA VOZ DE LA MASONERÍA PATRIOTA Y NACIONALISTA DEL PERÚ






MIEMBROS DEL CUERPO DIPLOMÁTICO ACREDITADO EN LOS ESTADOS UNIDOS DE MÉXICO, AUTORIDADES POLÍTICAS Y HH.·. Y HHNA.·. DEL RITO NACIONAL MEXICANO 






EL I.·.P.·.H.·. FERNANDO DURAN CONTRERAS G.·.M.·. DE LA GRAN LOGIA MIXTA DE SAN JUAN "BENITO JUAREZ"


LA ILUSTRE EMBAJADORA DE BELICE  




ACTA CONSTITUTIVA 


PALABRAS FINALES DEL I.·.P.·.H.·. JESÚS HUMBERTO RODRÍGUEZ LOZANO



EL I.·.P.·.H.·. LUIS FERNANDO LEÓN PIZARRO HIZO PRESENTE LOS MENSAJES,(POTENCIAS FUNDADORAS) DE LA M.·.R.·.H.·. LICIA CHUECAS VELÁSQUEZ,  G.·.M.·. DE LA GRAN LOGIA MIXTA DEL PERÚ DEL ANTIGUO RITO DE SAN JUAN, DEL I.·.P.·.H.·. JAVIER AGÜERO VEGA, SOBERANO GRAN COMENDADOR DEL SUPREMO SANTUARIO DE ANTIGUOS DISCÍPULOS DE SAN JUAN, I.·.P.·. Y REV.·. PEDRO VALENCIA GAMARRA, SOBERANO PATRIARCA PRIMADO DE LA ANTIGUA ORDEN - EKKLESIA GNÓSTICA DE SAN JUAN DEL PERÚ Y DEL I.·.P.·.H.·. SERGIO SARGO, SOBERANO GRAN COMENDADOR  DEL SOBERANO SANTUARIO DE LOS ANTIGUOS DE MEMPHIS DE BRASIL.

EL M.·.R.·.H.·. HUMBERTO RODRÍGUEZ LOZANO, EL EMBAJADOR DE LA FEDERACIÓN DE RUSIA Y EL M.·.R.·.H.·. LUIS FERNANDO LEÓN PIZARRO







EL EMBAJADOR DE LA FEDERACIÓN DE RUSIA ACREDITADO EN LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS, MOSTRANDO EL ACTA CONSTITUTIVA DEL CONSEJO MUNDIAL DE INSTITUCIONES MASÓNICAS – CMIM EN EL PALACIO NACIONAL DE MÉXICO.


EL M.·.R.·.H.·. LUIS FERNANDO LEÓN PIZARRO G.·.M.·. DE LA GRAN LOGIA PATRIÓTICA DEL PERÚ CON EL REPRESENTANTE DE LA REPÚBLICA DE ANGOLA LUIS RAFAEL FIGUEIREDO PERDIGÃO EN EL PALACIO NACIONAL DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS







EL ILUSTRE DIPLOMÁTICO ACREDITADO EN LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS ASISTIÓ A LA FUNDACIÓN DEL CONSEJO MUNDIAL DE INSTITUCIONES MASÓNICAS - CMIM Y A LA CEREMONIA CONMEMORATIVA DEL NACIMIENTO DEL I.·.P.·.H.·. BENITO JUÁREZ, BENEMÉRITO DE LA PATRIA, DE LAS AMÉRICAS Y DE LA HUMANIDAD.




NMIP: LUIS F. LEON PIZARRO

EL RITO NACIONAL MEXICANO Y EL CONSEJO MUNDIAL DE INSTITUCIONES MASÓNICAS - CMIM





martes, 12 de marzo de 2013

Sabiduría hiperbórea IV - SE ALERTA QUE EL ARTICULO ES NEONAZI






Habían pasado varias semanas desde la última vez que me reuní de modo formal con mi camarada, el profesor de Historia. A pesar de que nos comunicábamos por teléfono, y el habernos encontrado en dos oportunidades, no habíamos acordado en hacer el viaje a los Tres Picos; éste no acordar se debía a que esperaba que el Dr. de un modo formal me lo pidiera. Y ese día llegó.
Fue en una oportunidad que se encontraba en la “Biblioteca Mayor” de la Universidad Nacional de Córdoba cuando me habla por teléfono parta saludarme e invitarme a tomar un café. Accedo a la invitación, quedando de vernos en un bar frente de dicha biblioteca.
Llego a la cita con 15 minutos de retraso, excusándome saludo al Dr. tendiéndole la mano (1).

Croy. Hola Dr. Me alegra verlo, siento haberlo hecho esperar ¿Cómo se encuentra Ud.?

Dr. Bien Croy, Bien. ¿Quiere tomar algo?

Croy. Gracias, tomaré vodka. Dr. me da la impresión que esta invitación contiene algo importante pero no sé que es.

Dr. no puedo negar que Ud. sea perceptivo Croy. Todo este tiempo he estado pensando, permítame este término, en la Sabiduría Hiperbórea y mi familia de la cual Ud. nunca me preguntó.
Croy. Tampoco Ud. preguntó por la mía.

Dr. Es verdad Croy ¿Tendrá algún fundamento ese hecho?

Croy. Sí, claro que lo tiene Dr. El fundamento o razón por el cual no preguntamos por nuestras familias se debe a que a nosotros no nos une la amistad, nos une otra cosa, puesto que la amistad, como Ud. bien sabe, emana del corazón dando como resultado la complicidad. La familia no escapa a esta definición. Quiero decir con esto que es una manifestación puramente arquetípica, razón por la cual no hablamos ni preguntamos de ellas. De ningún modo quiere decir esto, que no sintamos afecto y no nos preocupemos por ella.

Dr. es verdad Croy, En cierta oportunidad, antes de nuestras conversaciones formales, me preguntaba si Ud. podría llegar ser mi amigo. Cuando leí lo que escribió sobre la amistad, tome conciencia de que nosotros nunca íbamos a ser amigos.
¿Se podría decir que el amigo de algún modo es un pariente?

Croy. Sí Dr. La amistad es la matriz funcional del animal mamífero plasmada en la superestructura cultural como manadas amistad. Y la familia con una pequeña variación, por tener la base matricial del pasú, que, como Ud. sabe, es un animal, a causa del encadenamiento espiritual devino en familia en la cual prevalece como “sostén” metafísico las matrices animales del pasú que se las conoce con el nombre académico de “Conducta social”, como por ejemplo: egoísta, envidioso, avaro, agresivo etc. De modo Dr. que la amistad y la familia tienen origen animal con el “matiz” de la autonomía óntica producida por el encadenamiento espiritual, o si Ud. quiere, el encadenamiento del Yo.
Sí, la amistad es parte de la familia por tener el mismo origen…animal. ¿Entiende Dr.?

Dr. SÍ entiendo Croy, pensaba en mis colegas antropólogos que todavía creen lo del eslabón perdido y todas esas cosas.

Croy. Mire Dr. los que están perdidos son ellos, con el agravante que son un eslabón de la evolución.

Dr. ja, ja, ja ¡muy bueno, muy bueno! ¡En la Edad Media mis colegas lo hubieran quemado vivo!

Croy. Mucho me temo que fue así Dr.

Dr. Su opinión de la familia es como dice, pero no deja de doler el tenerla sabiendo estas cosas ¡Que para peor son verdades!

Croy. Mire Dr. Ud. tiene una familia armónica, si por armónica se entiende no conflictiva. Sus hijos estudian, son responsables, no andan en bailes ni se drogan, tiene una hermosa mujer que lo ama ¿Qué más quiere Dr.? ¿Hacerles ver? ¡No Dr. no verán, perdieron la oportunidad! El que ve es Ud. disfrute de esta película de la cual es protagonista, porque esto es lo que vivimos, una gran película en tres dimensiones ¿Entiende Dr.?

Dr. ¿Cómo sabe eso de mi familia? Nunca lo hemos hablado

Croy. No sé. Solo sé que lo sé.

Dr. No me cuesta entender, me cuesta aceptar.

Croy. El no aceptar, en este caso, es no entender, o si Ud. quiere comprender. Esta capacidad del Virya es condición “sine cuanon” para no cometer errores al evaluar la realidad; quiero decir, ser imparcial.

Dr. Tiene Ud. razón, me he dejado ganar por la emoción. A propósito ¿Tiene Ud. familia?

Croy. Sí, la que me concibió y la que concebí. Mi padre falleció cuando era niño, mi madre vive, tengo hermanos y un hijo por los cuales siento un profundo afecto especialmente por mi hijo. Como Ud. puede ver Dr. tengo familia y los aprecio como Ud. a los suyos.

Dr. ¿También los suyos perdieron la oportunidad?

Croy. Sí, excepto mi hijo del cual me siento responsable de su integridad espiritual. Tal vez esto no sea de su agrado, pero tengo un concepto taoísta de los hijos, el padre es responsable hasta que uno de los dos muera.

Dr. Esa es la ética de Confucio, no taoísta.

Croy. Es verdad. El taoísmo carece de ética social por ser este eminentemente individual. El confucionismo al taoísmo, es lo que el nacionalsocialismo es a la Sabiduría Hiperbórea ¿Entiende Dr.?

Dr. ¿Puede exponerlo con más claridad?

Croy. Prácticamente la totalidad del pueblo alemán, esto es, los que no eran iniciados en la Sabiduría Hiperbórea, estaban regido por una ética social emanada del fundamento, político, económico y social del libro “Mi lucha” escrito por el Führer Adolf Hitler, lo mismo que la enseñanza de Confucio en china. La primera estaba bajo la mística Hiperbórea, y la segunda está bajo la mística del taoísmo, esto “groso modo”, claro está.

Dr. Sí, es verdad lo que dice, por ser confucionista no deja de ser loable esa relación filial, claro que es de difícil aplicación en occidente, más en esta época que nos toca vivir.

Croy. Mire Dr. yo soy occidental, de eso no hay duda, pero tampoco hay duda que no pienso como tal.

Dr. ¿Piensa como asiático?

Croy. No Dr. Como Virya despierto. No hay duda de que le preocupa su familia por tener una visión distinta a la de la superestructura, o si Ud. quiere, a la sociedad. La diré que solo existe un modo de tratar a la familia en la convivencia. El trato de Ud. hacia ellos será, primero, desde el honor, el amor será la resultante del mismo, que no será cualquier amor ¿Entiende? Ellos actuaran con Ud. desde el amor, que por otro lado es agradable, al honor lo aportará Ud. Si estas actitudes son reconocidas por su familia, esta estará sentada en el honor y no en el amor bridado por sus integrantes. Estimado Dr., esto es taoísmo en estado puro; tanto el amor como el honor al Virya le son indispensables ¿Entiende? En el complemento de estos contrarios éticos se encuentra la verdadera armonía familiar o de cualquier relación. ¡El amor jamás vencerá al honor! ¡Y cuando el amor sea vencido (mutado) por el honor, este será reconocido por el nuevo amor! Desde el cual el Virya tendrá, si lo desea, relación sexual y amar incondicionalmente a la mujer, pero jamás se enamorará de ella ¡Este es el único amor reconocido por nosotros los que nos consideramos superiores, todo lo otro es animal! ¡Si el Virya ama, ama el, si se enamora, ama el alma! La integridad y solidez afectiva de la familia descansa en la honorabilidad del Hombre, en este caso del padre, y el alimento indispensable de dicha conducta ética, es el amor aportado por la mujer, que en este caso es la madre.
En uno de mis aforismos aludo al honor y al amor. Dice así: “No es el amor quien te liberará, es el honor quien lo hará; más el honor con amor te eternizará” ¡No le pida más a la mujer que amor, que por ser arquetípico no deja de ser agradable, siempre que sea recibido desde el honor!
¿Entendió Dr.?

Dr. ¿Si entiendo? ¡Es imposible no entenderlo Croy! Le agradezco esta explicación ahora veo la familia de otro modo. Por momentos creí que estaba enfadado. Perdóneme.

Croy. Soy yo quien tiene que pedirle perdón Dr. Vio bien, estaba enojado con mis fantasmas.

Dr. Perdón, no lo entiendo.

Croy. Todos tenemos fantasmas Dr., la diferencia reside en que algunos los vemos y otros no. Se preguntará Ud. como son esos fantasmas.

Dr. ¿Cómo son Croy?

Croy. Son mis propios egos que en la lucha han quedado heridos, pero no muertos, o resignados que es lo mismo. Saben que están perdidos, que por razones estratégicas no los puedo eliminar aún.

Dr. Le seré sincero, no lo entiendo.

Croy. No se preocupe Dr. por no entender, Ud. pasará por la misma situación, puedo asegurárselo, y espero que también, no los elimine por razones estratégicas.

Dr. ¿Puede ser más claro? Algo me dice que es muy importante lo que está exponiendo.

Croy. No en este momento Dr. Le doy mi palabra que en la próxima reunión lo hablamos.

Dr. De acuerdo Croy, como Ud. diga. Le pediré algo, que es la razón por la cual lo invité.

Croy. Si está a mi alcance cuente con ello.

Dr. ¿Cuándo podríamos ir al cerro “Los tres picos”?

Croy. Cuando Ud. quiera Dr. Saldríamos a la mañana y regresaríamos a la tarde nuche. ¿Qué le parece?

Dr. como Ud. diga Croy ¿Está lejos el cerro?

Croy. En la pampa de Olaen, aproximadamente tres horas de viaje, pasando Cosquin, del peaje de Molinari 42 Ks. al oeste.

Dr. ¿Hay montañas en la pampa de Olaen? Tengo entendido que eso es un desierto.

Croy. Mire Dr. con rigor de verdad el cerro de “Los tres picos” se encuentra en unos de los extremos de la pampa, más precisamente al oeste de la misma. Este cerro no está registrado en los mapas geográficos por no tener relevancia, pero sí está registrado el pueblito en el cual se encuentra.

Dr. ¿Cuál es el nombre de ese pueblito Croy?

Croy. Characato.

Dr. ¡Dios mío! ¡Cerca de las ruinas jesuíticas de la Candelaria, en la cual se encuentra la Virgen que tiene en el cuadro! ¡El valle de la Candelaria y del Soto que nombrara el Capitán Kiev!

Croy. Es exactamente como Ud. dice Dr.

Dr. Varias veces pase la mirada por Characato pero buscaba el nombre “Cerro de los tres picos”. Hasta por el Uritorco lo busque por eso del “Cerro de Parsifal”. También pensé que sería una clave. Sin dudas jamás lo hubiere encontrado.

Croy. Hoy, en el pueblito de Characato, existe una posada con el nombre “Los tres picos”; este es un nombre muy tardío, quiero decir, resiente. Sin dudas fue puesto por alguien que leyó la novela mágica, pero desconozco quien pudo haber sido.
Mire Dr. Estoy buscando el modo de decir algo que es por demás difícil de exponer, y aún más de comprender; y es lo que concierne a esa región en la cual se encuentra “El cerro de los tres picos”

Dr. ¿En qué consiste el misterio Croy?

Croy. En que cuando estemos allí Ud. verá un Characato y yo veré otro.

Dr. En ese caso ¿Cuál es el verdadero?

Croy. Ninguno. Los dos son ilusión.

Dr. ¿Y cuál es la verdadera región? ¿El verdadero Characato?

Croy. A la repuesta solo la puede dar un Shidda o un pontífice, que potencialmente es lo mismo, cosa que yo no soy.

Dr. Croy me encuentro algo confundido ¿La Orden de Caballeros Tirodal y la espada sabia están en la misma realidad, o el mismo mundo?

Croy. Sin dudas Dr.

Dr. ¿Entonces como Ud. que está en el mundo de la orden no está en el mundo de la espada sabia?

Croy. Tendría que haber pluralizado la pregunta porque Ud. también está en el mundo de la orden. Es más, pertenece a la orden. Trataré de hacerlo comprensible con una analogía. Imagínese que usted es la orden, la verdadera orden, la orden de la espada sabia, que se mira en un espejo de pulido perfecto; el espejo devolverá una imagen fiel exacta de la verdadera orden, es decir, de usted ¿Me sigue Dr.?

Dr. Sí, sí, lo sigo.

Croy. Esa imagen reflejo de usted, es decir, de la verdadera orden, no es la orden. Bien, nosotros pertenecemos a la orden del espejo que es Ud. pero que no es ¿Entiende Dr.?

Dr. ¡Dios mío! ¿Cómo puede Ud. hacer entender estas cosas con tanta facilidad? ¿Entonces existen dos órdenes de Caballeros Tirodal?

Croy. No Dr. Existe solo una orden como existe un solo Dr. de historia, que es el que está sentado en este momento con migo, y no el del espejo.

Dr. ¿Por qué no integra la verdadera orden Croy? Es decir ¿Por qué no está en la orden o de este lado del espejo?

Croy. Perdón Dr. pediré más vodka… Todos los que estamos unido por el Aura Catena o vinculado carismáticamente con la orden, de algún modo integramos la verdadera orden, solo que algunos saben que la integran y otros no.

Dr. ¿Ud. sabe que la integra?

Croy. Sí, sé que la integro.

Dr. ¿Entonces estuvo en la caverna secreta con la espada sabia?

Croy. Estuve en la caverna pero no vi la espada sabia.

Dr. ¿Puedo preguntarle como llego?

Croy. Me llevó un superior.

Dr. ¿Nimrod de Rosario?

Croy. No lo sé; no le veía el rostro. No era un hombre. Era un ser superior a un hombre. Algo me decía que era él. Es una de Las razones por la cual estoy en la verdadera orden. Todo esto encierra un gran misterio del cual es difícil hablar, misterio que está estrechamente relacionado con la presencia física de los Dioses de Agarta en esta parte del mundo, y más concretamente en esta ciudad.

Dr. Croy si Ud. lo desea no hablamos más del tema.

Croy. No hay cuidado Dr. se con quien hablo. ¿Qué le parece ir a Characato el sábado próximo?

Dr. Quiero decirle algo Croy. Ya no quiero ir a Characato. Ud. me ha hecho ver el verdadero Characato. Ir allá, es ir a ver piedras, que a decir de Ud. no tienen ningún valor. Prefiero estar hablando con Ud. y verlo tomar vodka, y preguntarme cómo puede ser que no se emborrache.

Croy. Como Ud. lo desee. Es una buena decisión.

Dr. ¿Por qué es una buena decisión?

Croy. Porque la Espada Sabia ya no se encuentra en esa región.

Dr. ¿Cómo? ¿Cómo sabe que no se encuentra allí? ¿Quién se la llevó?

Croy. Tranquilícese Dr., le diré lo que pienso, que ocurrió. Como usted bien sabe, la Espada Sabia, es sabia por la piedra de Venus. Esta piedra que es una de las dos que se encuentran en Argentina, están custodiadas por una Vraya, es a lo que alude la Sabiduría Hiperbórea cuando asevera que las Vrayas poseen “un solo ojo” y “un solo diente”, en este caso, la piedra de Venus, que no es otra cosa que el ojo aludido. Quiero significar con esto que la Vraya es la custodia de dicha piedra, que al ausentarse de un ámbito estratégico se lleva la espada.

Dr. ¿Por qué se ausento? ¿Por qué se llevo la Espada Sabia? En una oportunidad Ud. dijo que la presencia de la Piedra de Venus en Córdoba nos era favorable para nuestra orientación, que creaba un clima espiritual muy especial.

Croy. Sí, es verdad, eso dije.

Dr. ¿quiere decir que ya no tenemos ese favor?

Croy. No Dr. ya no gozamos de ese favor, pero gracias a su influencia nos hemos hecho fuerte en la trinchera que es el mundo de la Casa de Tharsis, no pudiendo decir lo mismo de muchos camaradas que fueron los artífices de un movimiento que llevó a la Vraya a ausentarse con la Espada Sabia.
Dr. Por favor Croy ¿Me lo puede decir?

Croy. Mire Dr. no es que no quiera decirlo, pero es algo difícil de explicar y llevaría su tiempo.

Dr. Croy para usted nada es difícil de explicar, en cuanto al tiempo dispongo del necesario, siempre y cuando Ud. no disponga lo contrario.

Croy. Trataré de ser sintético. Como Ud. sabe la Orden de Caballeros Tirodal se integró con un número importante de personas de ambos sexos, ignorando estos integrantes cual era el objetivo que cumplió y cumple la orden, a excepción de unos pocos en los cual me incluyo, siendo uno de los objetivos estratégicos escribir un libro. Estimado Dr. para escribir un libro solo hace falta hojas de papel y una lapicera, lo que quiere decir que había otro objetivo, y este, era táctico ¿En qué consistía este movimiento táctico? En reunir a determinadas personas en el ámbito de un resiento llamado orden; pero estas personas eran muy especiales, por estar ellas, relacionadas en otras vidas con la espada sabia, por una palabra de honor dada y no cumplida por razones que ignoro, que de ningún modo tiene que ver con la traición, razón por la cual los elegidos eran confirmados por los mismos Shidas y posteriormente aceptado en la orden por el pontífice. Tanto los Shidas como el pontífice lo sabían todo de sus integrantes por tener la capacidad de anamnesis y de “leer” los registros óntico, que como Ud. bien sabe, están grabadas nuestra vidas pasadas. ¿Me sigue Dr.?

Dr. Sí Croy, lo sigo.

Croy. ¿Se imagina las cosas que nuestros superiores han visto en nuestro proceder tanto privado como social? Ja Ja Ja, no me mire así Dr., tal vez ellos se reirían o se ríen de nuestros actos. Pero no se haga problemas por esta supuesta “violación a la privacidad”, nuestros Superiores no son jueces, Ud. puede ser ladrón de bancos, pordiosero, traficante de armas, homosexual, o dedicarse a la “trata de blancas”, eufemismo este último usado por los hipócritas para encubrir la prostitución. Para nuestros Superiores estas “profesiones” no cuentan, no tiene importancia, son ilusión, ellos se encuentran más allá de toda moral, más allá del bien y del mal, son nuestros camaradas que con el apoyo logístico de su Sabiduría nos guían en esta guerra espantosa por la liberación de nuestros espíritus ¿Me entiende Dr.?

Dr. ¡Claro, como no entender!

Croy. Nuestros Superiores solo valoran dos actitudes en el Virya: La lealtad sin límite al Superior, y el valor del Yo ante el símbolo sagrado, que como Ud. bien sabe, esta actitud, este valor le es indispensable al Yo para ganar un espacio propio fuera de la conciencia, o si Ud. quiere la plaza Tau, que no es otra cosa que solucionar el misterio del ángulo recto.
En este pequeño repaso por nuestras cosas espirituales se encuentra la causa de porque nuestra Vraya se ausentó con la espada, o la piedra de Venus de la cual es guardiana.

Dr. ¡Dios mío! ¡No me diga que se traiciono a los Superiores Croy!

Croy. No se ponga mal Dr., que si se ha cometido una traición no soy yo quien lo afirmará. Solo puedo decir, que, por razones estratégicas nuestro pontífice tuvo que “retirarse” y muchos de los integrantes de la orden se sintieron desprotegido por tener una relación sacralizante para con él. Esto los llevó a esperar a que regresara o que se hiciera presente otro Superior. Todas las reuniones que se realizaron a posterior de la ausencia del pontífice, las conversaciones versaban en la necesidad de la presencia de un Superior, ignorando estos tontos que los que se habían ausentado de la orden eran ellos.

Dr. Entonces no se había ausentado, ¿Tenía presencia física?

Croy. No Dr. la presencia física no implica “estar”. Un pontífice puede estar en ausencia, o puede no estar en presencia, estando esto circunscripto a su necesidad estratégica. Al ignorar estas cualidades del pontífice, los integrantes de la orden pensaron que los había abandonado. Esta falta de claridad gnóstica llevó a afirmar a muchos integrantes de la orden que el pontífice se encontraba preso entre dos planos de significación, o que estaba recluido en un asilo de locos; o lo es peor, que le quitó la vida su madre.

Dr. ¡No lo puedo creer! ¿Lo dice en serio Croy?

Croy. Yo no bromeo con estas cosas Dr. Pero no se preocupe, son cosas del alma, son pura ilusión.

Dr. ¡Un iniciado no puede sacar esas conclusiones! ¡Una cosa en no ver, y una muy distinta sacar tamaña conclusión!

Croy. Es como Ud. dice, siempre y cuando hayan sido iniciados

Dr. ¿Pueden no haber sido iniciados?

Croy. Se lo expondré de modo analógico. Imagine a un señor que desea ascender una pendiente de unos 20 grados, la cual por el peso adicional que posee no puede salir de la inercia. Alguien que sabe de su dificultad decide ayudarlo diciéndole: ¡Vamos inténtelo yo le ayudaré a iniciar la marcha! Con la ayuda adicional el buen hombre sale de inercia. Con dificultad y lentitud comienza el ascenso; solo la voluntad y el claro objetivo lo mantendrán sin claudicar, siendo observado por aquel que lo ayudó. Nuestro buen hombre asciende con dificultad, con el claro agotamiento que acusa el esfuerzo; mira hacia adelante y la pendiente se hace interminable, sin detenerse, mira hacia atrás y a la distancia divisa a quien lo ayudó, sabe que no debe detenerse porque no podrá retomar la marcha nuevamente, pero sus fuerzas se agotan y se detiene, mira con temor la interminable pendiente, vuelve la mirada hacia atrás y contempla con espanto que el hombre que lo ayudó no se encuentra adonde lo vio por últimas vez. El pánico causado por tal situación lo hace regresar al lugar en el cual se encontraba al comienzo del ascenso. Ya no podrá intentarlo nuevamente, sin ayuda le será imposible; ha quedado solo con el peso adicional del que no se quiso o no pudo despojarse. Está perdido ¿Entiende la analogía Dr.?

Dr. Sí, como no entender. El que lo ayudó o inició es el pontífice. La dificultad de ascender es igual a la comprensión de la Sabiduría, y el peso adicional son los contenidos arquetípicos ¿Es así Croy?

Croy. Sí Dr., es así. Como al personaje de la analogía, el pontífice nos ayudó-inició a todos los elegidos. Muchos quedaron detenidos en el camino, otros regresaron. Los menos siguen ascendiendo, sabiendo que quien los ayudó no se encuentra a la vista, pero con la certeza que el pontífice está, que los observa ¿Sabe adónde conduce el camino en pendiente Dr.?

Dr. ¿A Agartha, al origen?

Croy. Sí Dr. Para el caso es lo mismo. Este camino que también Ud. comenzó a andar, más arriba se encuentran peligros indecibles, que solo aquel que se haya despojado de todo peso adicional podrá sortear.

Dr. ¿Le puedo hacer una pregunta?

Croy. Claro que sí.

Dr. ¿También yo soy un iniciado? ¿Y si es así, quien me inicio? ¿Usted? Se lo pregunto porque dijo que también yo subo por la pendiente.

Croy. Sí. Ud. es un iniciado. En el contexto del un vínculo carismático, leyó y acepto los escritos del Superior Nimrod. Con ese solo hecho usted ha adquirido un compromiso de honor con Nimrod, es decir, con la verdadera orden, y a través de él, con los Sidas leales. Quiero significar con esto, que el pontífice no lo inició por estar el ausente, y yo por no ser un pontífice. De modo que, estimado Dr., Ud. se auto inició. No debe detenerse en el ascenso por el camino, que como Ud. bien dice, conduce al origen. Si lo hace, nadie lo ayudará como al personaje de la alegoría.

Dr. ¿Ud. tampoco me ayudaría Croy?

Croy. Tampoco yo Dr. Como no lo harían mis superiores conmigo si me detuviera. Nos ayudan y nos ayudarán siempre y cuando no claudiquemos en el ascenso. Los que claudicaron, que como dije más arriba, fueron los más quedaron expuesto a la presión del enemigo que los manipulo haciéndole hacer cosas incalificables, como por ejemplo, hacerle afirmar que viajaron a Agarta, viendo allí a los Shidas realizando prácticas de un supuesto Yoga rúnico, y que los mismos Superiores les facilitaron la lectura de los libros de cristal, afirmaciones astas de neto corte psicótico por estar encuadrado en lo que en psiquiatría se conoce como delirio. Otros intentaron hacer una síntesis de la obra de Nimrod con Serrano, Évola y Guenon, por ser estos tres últimos más digeribles por el alma de estos...pobres tipos.

Dr. Es increíble. Lo creo porque lo dice Ud.

Croy. Es así. Todos aquellos que descendieron por la pendiente, más los que se detuvieron y luego también descendieron, conformaron un grupo en el cual se tejieron las más incalificables prácticas. Este grupo, o quien se decía ser su pontífice, subió a la web unos escritos con forma de libro los cuales Ud. me preguntó, tiempo atrás si se podían leer, contestándole que por razones estratégicas todavía no era conveniente ¿Recuerda Dr.?

Dr. Si lo recuerdo. Ahora entiendo porque me lo aconsejó.

Croy. Si lo desea, ahora puede hacerlo.

Dr. ¡No gracias! ¡No tengo ningún interés de leer eso!

Croy. Los “líderes” del grupo se valieron de los “camaradas “que contactaron por internet, que no eran pocos, para que aportaran una determinada cantidad de dinero indispensable para el funcionamiento de grupo, y no digo de la estrategia porque no la tenían. Así se quedaron con varios miles de Euros y Dólares en beneficio propio.

Dr. ¡Eso es deleznable! ¡Es traición! ¡Me da asco Croy!

Croy. Contrólese Dr. Es un hecho deleznable y asqueroso como Ud. bien dice, pero lo de traición no está a nuestro alcance aseverarlo. Solo los Dioses lo pueden hacer, y son ellos los únicos, si así lo consideran, los que pueden verter ese calificativo a tamaña acción.

Dr. Ahora caigo en cuenta, porque cuando se refería a los integrantes de la orden nunca los llamó camaradas, ni integró grupo alguno.

Croy. Así es Dr. a pesar que hubo intentos no formales de invitación al mismo no lo hice. Eso los llevó a mentir en nombre de la Vraya y Pontífice para desprestigiarme ante los de más, muchos de los cuales tenían comunicación por mail atreves del cual me hacían preguntas referente a la Sabiduría las cuales, por supuesto respondía, hasta que se dieron cuenta que estaba en otra cosa. Es decir, en la verdadera cosa, que es cumplir con los postulados enseñado por nuestro guía y pontífice que están expuesto en sus escritos, de los cuales los más importantes estratégicamente hablando, son, “Los fundamentos de la Sabiduría Hiperbórea” y la Novela Mágica…” que en nuestra weltanschauung gnóstica es lo mismo. Es decir, vivir y actuar desde en el mundo de la sangre de Tharsis, o si Ud. quiere, no detenernos en el ascenso de la pendiente.

Dr. ¿Qué fue de ese grupo, o de la gente que lo integró?

Croy. En una oportunidad hable por teléfono con la Vraya para hacerle saber de modo personal lo que acontecía en Córdoba con este grupo, al indagarme sobre “que pasaba en Córdoba”, le conteste que no se lo podía decir por teléfono, de ahí lo de querer verla, contestándome que no me podía recibir sin la autorización de los Superiores, por lo cual les pediría permiso. Al hablar por segunda vez la Vraya me informa que los Superiores no la autorizaron a hablar conmigo pero que a ella le podía hablar cuando yo quisiera y a cualquier hora, aconsejándome que debía estar en alerta porque en Córdoba “podía pasar cualquier cosa”. Es obvio que la Vraya pidió información más precisa de lo que ocurría en con estos sujetos.

Dr. ¿A quién le pidió información ¿Lo sabe Ud.?

Croy. No lo sé, pero es obvio que a los Superiores. La cosa es que la Vraya tomo contacto con el Noyo de la orden y ambos conformaron una estrategia para anular al enemigo que actuaba a través de este grupo. El modo de moverse del Noyo lo desconozco, pero este tuvo dos reuniones con integrantes de este grupo, comenzando así el principio del fin de estos “reformadores”. Una vez puestas las cosas en orden, la Vraya se retira con la espada sabia por ser ella su guardiana y el Noyo se sitúa bajo el umbral de sentido.

Dr. ¿Cuántos quedamos Croy? ¿Cuántos camaradas somos?

Croy. Pocos Dr., muy pocos.

Dr. cuantos conoce Ud. ¿Puede decírmelo?

Croy. Cuatro que yo conozca.

Dr. ¡No! ¡No puede ser! Dígame que es una broma.

Croy. No Dr. Yo no bromeo con estas cosas.

Dr. Ud. me dijo en cierta oportunidad que eran cerca de 200 los integrantes.

Croy. Así es. El enemigo nos causo muchas bajas, también tenemos numerosos heridos, paro resistimos Dr., resistimos, lo evidencia el hecho de que todavía ascendemos. Muchos lo hacen herido, pero lo hacen. A veces me detengo a mirar hacia atrás, y veo con alegría que algunos vienen ascendiendo, con dificultad, pero ascendiendo. No Dr., no nos vencerán, solo tenemos que resistir, y si perecemos que sea ascendiendo, jamás descendiendo, que mientras quede uno intentando subir, si lo logra habremos ganado la batalla, porque en ese que lo logró estaremos todos lo que perecimos en el intento.

Dr. Yo tengo que agradecerle a Ud. la claridad con la que me hace ver las cosas. Sin su ayuda no hubiera visto esto con la claridad que las veo. Tal vez no le agrade esto, pero yo a usted lo considero mi guía.

Croy. No Dr., no se equivoque, yo no soy su guía, nuestros guías son los Siddhas, yo solo soy un camarada con quien se encontró luchando en la misma trinchera, en la cual Ud. se ha quedado si municiones para su ametralladora y yo le alcanzo una cinta con proyectiles para que siga disparando. Nuestros guías son los que integran el alto mando, los que planifican los movimientos táctico estratégicos de los cuales son pocos los que conocen dichos movimientos, siendo yo uno de los que no se encuentran en esos pocos. Nosotros solo combatimos en una trinchera del frente cumpliendo una orden que se nos ha dado nuestro Superior a través de sus escritos, quedando bajo nuestra responsabilidad que el enemigo la tome. La trinchera a la cual aludo se encuentra en el interior de cada Virya ¿Entiende la analogía Dr.?

Dr. Sí Croy, entiendo, pero sin sus proyectiles yo no podría seguir luchando

Croy. Tiene algo de razón en eso, pero una cosa es una ayuda, y algo muy distinto quien oficia de guía. Un guía pude brindar ayuda, pero no todos que brindan ayuda son necesariamente guías. Mire Dr. , un guía conoce todas las calles de Córdoba, y no solo eso; conoce cuantos taxi, cuantas líneas de colativos, cuantos habitantes viven, que hacen y cual son sus gustos etc. A este saber extiéndalo al universo. El guía lo sabe todo, lo conoce todo, yo, solo conozco algunas calles del centro y algunos barrios, que si Ud. las busca y no la encuentra puedo conducirlo allí pero nada más ¿Lo entiende verdad?

Dr. Como no entenderlo. Le haré una pregunta Croy ¿Alguien le enseñó a hacer ver valiéndose de analogías?

Croy. Temo no poder responder a esa pregunta Dr. porque yo también me la he hecho. Tuve una relación muy estrecha con mi guía. Era como si nos conociéramos desde siempre. Tal vez me enseño este método de hacer ver sin que yo sepa cómo. Tal vez sea una capacidad innata. No lo sé, pero puedo hacer entender cualquier manifestación del mundo espiritual del cual la razón no tiene la más pálida idea a cualquier persona, no importando su capacidad intelectual incluyendo a los niños que sepan hablar, claro está.

Dr. Ese método ¿También tiene que ver con la mayéutica?

Croy. Sí Dr. Con nuestra mayéutica, que no es la socrática.

Dr. Siento algo que no sé que es. Es algo agradable, gratificante no sé cómo explicarlo; es como si no estuviéramos en la tierra. No tengo otra palabra que un gratificante misterio.

Croy. Sí. Es un gratificante misterio para el Yo, y un espanto sin límite para el alma. Estamos en la tierra Dr., en el infierno, solo que aquí, adonde nosotros estamos hay menos brasas, pero estamos en el infierno.

Dr. Siempre que hablo con Ud. es como me sintiera en deuda. No sé cómo explicarlo.

Croy. No tiene que nada explicar, y esto por una simple razón: no me debe nada, pero como se que insistirá con eso, pague el vodka que tome y estamos hecho.

Dr. Ja, Ja, Ja. Ud. sabe que no es eso a lo que me refiero.

El Doctor pagó lo bebido y nos retiramos del bar. En la vereda peatonal de la Biblioteca Mayor nos despedimos no si antes agradecerme por mi reflexión taoísta sobre el amor y el honor en la familia, y agregar con el apretón de manos: “Croy, aunque lo niegue, Ud. es mucho más que un Virya despierto”, a lo que le contesto: “Solo soy un Virya despierto, es Ud. quien es mucho más que un profesor de historia de la Universidad Nacional de Córdoba”. “Que los Dioses lo acompañen Dr.”.


(1). Este diálogo al no ser grabado contiene errores de forma (lo textual), pero no de fondo (lo fundamental).