"Para los cabalistas, la Divinidad es una entidad tan
inaccesible
que la sitúan más allá de la luz y de las tinieblas, más allá de
los mundos creados. A esta entidad le han dado el nombre de Ain
Soph Aur: Luz sin fin. Y para expresar aún mejor su misterio, más
allá de Ain Soph Aur han concebido una región que han llamado Aïn
Soph : Sin fin, y todavía más allá de d’Ain Soph, Ain : Sin. En
el origen del universo hay por tanto una negación. Pero Sin, que
significa la ausencia, la falta, no significa sin embargo la no
existencia. Ain no es la nada absoluta tal como algunos
imaginaron el Nirvana de los hindúes. De hecho, es exactamente lo
contrario. Ain Soph Aur, como el Nirvana, no es una no
existencia, una nada, sino una vida más allá de la creación, de
la manifestación, y tanto más allá que parece no ser nada.
que la sitúan más allá de la luz y de las tinieblas, más allá de
los mundos creados. A esta entidad le han dado el nombre de Ain
Soph Aur: Luz sin fin. Y para expresar aún mejor su misterio, más
allá de Ain Soph Aur han concebido una región que han llamado Aïn
Soph : Sin fin, y todavía más allá de d’Ain Soph, Ain : Sin. En
el origen del universo hay por tanto una negación. Pero Sin, que
significa la ausencia, la falta, no significa sin embargo la no
existencia. Ain no es la nada absoluta tal como algunos
imaginaron el Nirvana de los hindúes. De hecho, es exactamente lo
contrario. Ain Soph Aur, como el Nirvana, no es una no
existencia, una nada, sino una vida más allá de la creación, de
la manifestación, y tanto más allá que parece no ser nada.
Ain Soph Aur, Ain Soph, Ain… es así como los cabalistas trataron
de definir la esencia de la Divinidad. Ésta escapa a nuestro
entendimiento, pero estas palabras pueden hacernos sentir lo que
es imposible de expresar."
de definir la esencia de la Divinidad. Ésta escapa a nuestro
entendimiento, pero estas palabras pueden hacernos sentir lo que
es imposible de expresar."