sábado, 1 de septiembre de 2012

Convertirnos en libros vivos...




"Es difícil medir el poder de una influencia, pero esto lo vemos
todos los días. He ahí una actriz conocida que decide cambiar
de peinado: no tiene necesidad de ir por todas partes predicando
para que la imiten, tiene su foto en las revistas, sale en la
televisión, y de un día para otro un gran número de mujeres se
peinan como ella, visten como ella, etc.



Una influencia espiritual es ciertamente más sutil, pero es una
influencia de todas formas y actúa imperceptiblemente. Es por
ello que debéis trabajar sobre vosotros mismos con el fin de
convertiros en libros vivientes que inspirarán a todos los que
encontraréis. Incluso, sin abrir la boca, hablaréis. No son
siempre las palabras las que son más persuasivas. Por lo tanto,
convertirse en libros vivos, he aquí el trabajo que debéis
tomaros en serio a partir de ahora: tendréis una influencia
benéfica sobre todos aquellos que se acercarán a vosotros.
¡Esto también es amor fraternal!"

Omraam Mikhael